5 sept 2011

Cowboys & Aliens


Hay algo que no entiendo en lo que respecta a ésta película: la asombrada/indignada/curiosa reacción de público y crítica hacia la mezcla de vaqueros del Far West e invasores alienígenas. ¿Es que la gente no recuerda el enfrentamiento entre Jesse James y el monstruo de Frankenstein en Jesse James Meets Frankenstein's Daughter (William Beaudine, 1966)? ¿O títulos más relativamente recientes como Ghost Town (Richard Governor, 1988)?

Bueno, ésas dos probablemente no. El caso es que para que una película sea un western lo único indispensable es que esté ambientada en el oeste americano en el siglo XIX, y a veces ni eso como demostró el gran Sam Peckinpah, con lo cual dentro de este marco pueden tener lugar todo tipo de historias diferentes. En el cómic, la serie italiana de la casa Bonelli Tex demostró que se pueden meter todo tipo de historias diferentes dentro del género (incluidos invasores extraterrestres). Y si Howard McCain situó una invasión extraterrestre en un pueblo vikingo en el siglo I d.C. en la estupenda Outlander (2008), ¿por qué no en un pueblo del oeste americano? Ya comentaba Ridley Scott que podría haber ambientado Alien (1979) en el siglo XV, simplemente cambiando a los protagonistas por colonos que encuentran algo extraño en una isla perdida.

Por tanto, me fui con la mente abierta a ver Cowboys & Aliens (Jon Favreu, 2011). No sólo por la mezcla de dos géneros que me gustan, como son el western y la ciencia-ficción, también por ver que hacía Favreu tras la experiencia llevando al cine a Iron Man y porque el film cuenta con un guion de Alex Kurtzman, Roberto Orci y Damon Lindelof, conocidos por su trabajo en la serie Lost, además de otros nombres que no me suenan de nada. Y la hipnótica presencia de Olivia Wilde, claro (aunque no recomiendo ir a ver una película sólo porque sale tal o cual actor/actriz, por mucho que os gustaría conocerl@ en el sentido bíblico de la palabra).

No sé si sabéis, o si os importa, que esta película se trata de la adaptación de un cómic. Yo lo he leído (qué sorpresa) y la verdad es que es bastante malo. Lo cual juega a favor de la película: es fácil mejorarlo y lo hacen. Por una vez, la infidelidad hacia el material base es algo bueno y a la hora de escribir el guion simplemente cogieron el concepto de extraterrestres en el oeste y ya está.

De modo que Cowboys & Aliens es lo mejor que nos ha dejado el verano cinematográfico después del Super 8 de J.J. Abrams, y en ambas el nombre de Steven Spielberg aparece en los títulos de crédito. Como si estuviésemos en una especie de bucle temporal.

Cowboys & Aliens tiene muchas cosas buenas que ofrecer al espectador: entretenimiento, diversión, aventuras, buenos efectos especiales y los pezones de Olivia Wilde cortesía de la HD. Todo lo que una buena película veraniega debería ofrecer. La mezcla de personajes clásicos del western y los malvados invasores espaciales funciona a la perfección, gracias especialmente al gran reparto.

¡Y qué reparto, gente! Clancy Brown como el reverendo-pistolero está genial, este hombre ha envejecido como el vino. Sam Rockwell lo borda ya que ofrece una interpretación bastante comedida, sin descontrolarse. ¡Y el p*t*  Keith Carradine como sheriff! Insuperable. En cuanto al trío protagonista, Daniel Craig encaja bastante bien en el paisaje y Olivia Wilde pues es Olivia Wilde. El que me da un poco de pena es Harrison Ford, no lo veo envejeciendo como actor de carácter o adaptándose a los nuevos tiempos como Clint Eastwood, básicamente hace lo mismo que lleva haciendo toda la vida.

La película avanza con un ritmo clásico. Es decir, rápido pero sin acelerar por miedo a que el espectador pierda interés y no parece editada por un epiléptico. Así, metiéndote en la película sin prisa pero sin pausa se puede permitir ciertos toques que son predecibles pero no restan diversión a la función.

Resumiendo, ésta película es la ideal para ver en verano. Supongo que por eso la han estrenado en septiembre.

2 comentarios:

Dr. Gonzo dijo...

Casualmente me he leído el cómic hoy mismo (lo compré hace dos días), y estoy de acuerdo contigo. Es malo, aunque resulta entretenido, pero el guión muy pobre y los dibujos, no sé si será cosa mia, pero me han parecido cutrísimos en algunas viñetas.

La película la veré este miercoles, y dudo que no me guste, ya que, al igual que a ti, son dos géneros que me gustan, aunque las últimas películas que han hecho sobre invasiones alienígenas son pura mierda. Sólo tengo esperanzas en esta y en Extraterrestre, de Nacho Vigalondo.

A mi también me parece una bobada eso de no aceptar que un western pueda tener elementos fantásticos (de hecho, lo comenté hace poco en mi blog), pues se trata únicamente de una época histórica, y tratándose de una historia de ficción ¿por qué no iba a haber aliens, yetis y hasta chupacabras?

En fin, que tengo ganas de ver esta película, ¡aunque se podrían haber esperado un poco más en los carteles!

Raúl Calvo dijo...

Sí, los carteles son bastante cutrongos. Buscando información sobre la peli vi en una revista de cine que el corresponsal encargado de ver como van las cosas por USA casi se regodeaba en el hecho de que la película fuera un fracaso en USA, cosa que no entiendo. Pero demuestra que la calidad de una película no la prueba lo mucho o poco que haga en taquilla. Y lamento que la veas doblada, porque el tono y los dejes de la gente hablando "al estilo del oeste" le dan un toque genial (vi el tráiler doblado hace un tiempo y las voces son realmente malas). En todo caso, si la ves en un cine de con HD, atento a los pezones de la Wilde, que son visto y no visto.